Una mezcla rara de tecnología y finanzas.
Recientemente fui a una entrevista en cierta empresa de bebidas energetizantes de cierto toro rojo. La sensación al entrar fue lo que alguna vez vi en internet, las oficinas de Google. Tal vez exageré un poco, porque no tienen nada de parecido, pero el ambiente en ellas se siente muy relajado y no sé por qué tuve esa sensación.
Por si no conocen las oficinas les dejo un pequeño video:
Ojalá todos los trabajos fueran así.
Desde hace casi tres años he sido un feliz usuario de un SmartPhone BlackBerry. Y gracias a que en mi último cambio de equipo elegí el BlackBerry Torch, mi amor por la marca ha decaído. El OS 6.0 no termina de convencerme, la experienca de BlackBerry con los dispositivos touch dista de ser buena, el Torch necesita más poder de procesamiento y para acabarla de joder, la funda original está hecha de vil cartón (lo sé porque se está deshaciendo).
Hace ya algunos meses tuve la oportunidad de medio probar un SmartPhone LG con Android. No sé que teléfono era ni que versión de Android cargaba. Pero lo encontré bastante amigable. Claro que si el teléfono no es mío, no puedo meterle mano como quisiera.
Resulta que mi mamá se me adelantó, aprovecho una venta nocturna con meses sin intereses, porcentaje cargado al monedero electrónico y no sé que tanto más, para comprarse una Samsung Galaxy Tab. Como ya es costumbre, cuando hay compra de algún gadget nuevo, suelo ser el consultor y el instructor de uso. Y ayer tuve la oportunidad de estar un par de horas jugando con esta tablet. Mis comentarios son los siguientes:
En cuanto a hardware:
En cuanto al software:
En fin, aunque este modelo de tableta no es nuevo, creo que el camino que están tomando tanto los fabricantes como Google y sus desarrolladores es uno que esta haciendo temblar a varios grandes, entre ellos BlackBerry que en su último trimestre no dio buenos resultados.